Las pequeñas librerías son parte integrante de nuestra cultura y nuestras comunidades locales. Son lugares donde los escritores pueden conectar con los lectores, donde descubrimos mundos nuevos y desconocidos, donde los niños quedan cautivados por la emoción de la lectura que puede durar toda la vida. Son los lugares que nunca dejan de inspirarnos, unirnos y difundir el amor por los libros. Su papel resulta crucial en caso de que se encuentren en zonas remotas, como las islas griegas.

Reading Greece habló con Despina Melianou, propietaria de la librería Koukoumavla (se pronuncia Kukumavla), sobre el papel de las pequeñas librerías y su influencia en las preferencias de lectura, así como sobre los retos a los que se enfrentan y las perspectivas de futuro.

Koukoumavla es una pequeña librería en la isla de Patmos, cuyo objetivo es introducir a sus visitantes en el mágico mundo de los libros y el arte.  ¿Qué historia hay detrás de esta aventura?

Κοukoumavla es mi alter ego, el espacio/mundo que he creado con mis manos, con todo mi ser, de arriba abajo. ¡Mi abuela me llamaba Koukoumavla desde muy pequeña porque solía contarle mentiras todo el tiempo! La lechuza («koukouvagia» en griego) es sabia, pero en nuestro dialecto local, Koukoumavla es un poco «tonta» porque puede decir tanto mentiras como la verdad, como en los cuentos de hadas. En 2003, abrí (junto con mi marido, Andreas) mi primer Koukoumavla, en Skala, Patmos. Un café/bar/artesanía y libros. Lo que hice fue bastante innovador para la Grecia de entonces.  Era un lugar donde ocurrían milagros. Lo llamé espacio polivalente. Cuentacuentos, música en directo, presentaciones de libros, bazares de artesanía, seminarios de arte y mucho más. En 2016, dejamos este espacio en Skala y en 2017 abrí mi «mundo», en Chora (se pronuncia Jora), manteniendo sólo la parte de Artes y libros. De arriba abajo, la elección de los libros y todos los demás objetos pasan por mis filtros; todo tiene que encajar para permanecer en su lugar. Y todo, en todas partes, tiene que ver con historias, ¡muchas historias! Yo, Koukoumavla, con mi tienda de milagros, invito (¡y reto!) al visitante a entrar en el mundo del Arte y los Libros, y experimentarlo desde mi propia perspectiva.

¿Qué tipo de libros pueden encontrar los lectores en su librería?

Bueno, sobre todo los que me gustaría leer o los que ya me encantan. Al principio empecé con poesía y libros infantiles, que aprecio mucho. Sin embargo, cada año mi biblioteca se enriquece más y más. En mis estanterías encontrarás libros de filosofía, psicología, poesía, cuentos de hadas (tradición popular), literatura, cómics, ensayos y, por supuesto, libros infantiles. Y no sólo en griego, sino también en otros idiomas.

¿Qué importancia tienen las pequeñas librerías? ¿Cómo influyen en las preferencias de lectura?

Creo que en las pequeñas librerías estamos todos un poco locos. Lo que equivale a que ¡nos encanta el libro y lo defendemos con pasión! Somos una reminiscencia del médico del alma porque podemos averiguar o adivinar qué libro le conviene a cada lector. Muchas veces, personas desconocidas me preguntan «qué libro» leer, y yo les respondo que no les conozco lo suficiente como para saber sus preferencias, pero que estoy encantada de hablarles de mis favoritos. Y así, sin más, la gente sale de Koukoumavla en verano con Si esto es un hombre, de Primo Levi, publicado por Agra. Otras veces, de nuevo, es el visitante/lector el que me pilla «sin leer» y entonces son ellos los que me recomiendan un libro (¡que me encantará, aunque aún no lo sepa!). ¡Una efervescencia de almas sucede dentro de las pequeñas librerías!

¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrentan las pequeñas librerías hoy en día? ¿Cómo responden a estos retos? ¿Y las perspectivas de futuro?

¿Desafíos? Todo es difícil. Más aún para mí, porque es un reto por naturaleza, por la ubicación, trabajar sin parar todo el año. Hay que vivirlo para entenderlo. Internet, con un clic, te lleva los libros a la puerta de casa mucho más baratos. Resulta que recomiendo libros, hablo de ellos con toda mi pasión y los visitantes les hacen fotos, diciendo que los conseguirán en internet. Tengo que disculparme porque en las pequeñas librerías es imposible tener los precios de las grandes. Afortunadamente, todavía hay gente que nos conoce y nos apoya. También hay ebooks y podcasts, que sustituyen al libro como objeto. Toda la situación de las pequeñas librerías es cualquier cosa menos útil. ¿Cuál es mi reacción? Respiré hondo y tomé la decisión de no dejarme afectar tanto por todo esto; de seguir dando lo mejor de mí a lo que hago y amo mientras pueda. ¡Nos deseo mucha suerte a todos!

¿Diría que la reciente crisis socioeconómica y la pandemia que la siguió han roto los lazos que unían a una parte de los lectores con las opciones y la orientación de las editoriales tradicionales, creando un espacio estético e intelectual que sin duda puede crecer?

Me siento como el héroe de Fahrenheit 451 de Ray Bradbury. Un futuro desconocido pero me veo huyendo, con algún libro escondido, sobre mí, ¡para siempre mío! ¡Mi precioso!

En la era de la comunicación en línea, ¿cómo han influido las redes sociales en lo que la gente elige leer? ¿Cómo han cambiado/evolucionado las preferencias de lectura a lo largo de los años?

Debo admitir que prefiero pintar, leer o hacer lo que me apetezca que navegar por los medios de comunicación. Tardo casi una hora entera en publicar algo en Instagram, por ejemplo. Esto no significa que al resto del mundo le ocurra lo mismo. De hecho, las redes sociales afectan a los lectores; ¡a mí me parece que afectan a los lectores más de lo que deberían! Personalmente, prefiero que me influyan (sobre los libros) las opiniones de la gente a la que aprecio y las mías propias. Es bastante frecuente que un libro se haga superfamoso a través de los medios de comunicación; es como El traje nuevo del emperador (supongo que todos conocen este cuento de hadas… ¡el emperador estaba desnudo!). Afortunadamente, las redes sociales también tienen otra cara: ejercen una influencia saludable. Hay personas cuyos pensamientos son similares a los nuestros… y cuando nos encontramos, mi pequeña librería, este pequeño microcosmos mío, se convierte en un enorme paraíso. Y nos salen alas y nos convertimos en ángeles eternos y vamos a todas partes, ¡volando por el tiempo y el espacio!

El texto original de la entrevista, concedida a Athina Rossoglou, está disponible en nuestro sitio web en inglés Greek News Agenda

Traducción al castellano por Christos Peppas

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