La exposición Documenta, una de las mayores muestras de arte contemporáneo del mundo, abandona por primera vez en su larga historia el papel de permanente anfitriona para convertise en huésped de Atenas. Desde 1955 viene celebrándose ininterrumpidamente, cada cinco años, en la ciudad alemana de Kassel y dura 100 días. Sin embargo, este año ha decidido compartir sede con Atenas.
Bajo el título “Documenta 14: Aprender de Atenas”, su XIV edición comenzará en la capital griega la primera semana de abril y, a continuación, se inaugurará, como era lo habitual hasta ahora, a principios de junio en Kassel, quedándose abierta hasta el 17 de septiembre. De esta forma, durante un mes transcurrirá de manera paralela en ambas ciudades.
Los principales eventos de la exposición de este año se centran en la crisis de los refugiados, la crisis económica, la censura y la solución de los problemas, explicó Annie-Claire Geisinger, Coordinadora de Comunicación ante los corresponsales extranjeros en su sede de Atenas.
La mayor parte de la programación tendrá lugar en el Centro Municipal de Artes, sito en el céntrico Parque de la Libertad, el cual ya desde septiembre pasado ha puesto en marcha una serie de actividades públicas (conferencias y coloquios, grupos de lectura, proyecciones, talleres de trabajo, presentaciones) para que el público ateniense vaya familiarizándose con el carácter y la magnitud de la Exposición.
El primer evento público de Documenta 14, que busca un equilibrio entre dos ciudades tan distintas, se presenta como un alegato a favor de la libertad y la democracia a través del diálogo y contra las actuales corrientes europeas y la violencia de Estado. Esta es la razón por la que se escogió un local con un fuerte simbolismo político, el Centro Municipal de las Artes, que en la época de la dictadura había sido centro de torturas de la entonces Dirección General de Seguridad. Pues en esta “ruina histórica” se pretende crear un ámbito público experimental en medio de una coyuntura en que se están debilitando las instituciones democráticas. En este espacio 45 artistas griegos y extranjeros, así como historiadores y curadores, son llamados a concebir y producir dos instalaciones muy interesantes, “El Parlamento de los cuerpos” y “34 ejercicios de libertad”, ambas basadas en el diálogo e incluyendo una multitud de voces divergentes, heterogéneas o calladas.
El Partenón de los libros
“El Partenón de los libros” será la instalación emblemática de la Exposición; el artífice de esta magnífica obra es la artista argentina, Marta Minujín, quien ha optado por erigir este peculiar Partenón como un símbolo de resistencia en contra de la censura de escritos y la persecución de sus autores. Para este fin se lanzó un llamamiento a autores, editores y público a donar libros para con ellos construir una réplica del Templo sagrado de la Acrópolis ateniense, el cual simboliza la estétita y los ideales de la primera democracia en el mundo.
El templo, compuesto de 100.000 libros procedentes de todo el mundo que fueron o están prohibidos, se erigirá en la plaza Friedrichsplatz de Kassel, allí donde en 1933 los nazis quemaron unos 2.000 libros en el marco de la “Campaña en contra del espíritu no germano”. Minujín realizó ya este proyecto en 1983, tras la caída de la dictadura en Argentina, reuniendo todos los libros prohibidos por la junta militar de su país.
¿Por qué Atenas?
La co-organización de la 14ª edición de Documenta entre Kassel y Atenas fue una propuesta de Adam Szymczyk, director artístico de la feria, quien explicó que el propósito de dicha decisión es “reflejar la situación actual en Europa y poner de relieve las tensiones palpables entre el norte y el sur».
Szymczyk considera que la elección de Grecia se desmarca de los conflictos entre el país mediterráneo y Alemania y que su punto focal es su situación geográfica y la migración. «Lo que me interesa de Atenas es que se trata de una metrópolis que se conecta con otras a través del mar. Limita con Turquía, tiene una gran afluencia de inmigrantes procedentes de Asia y África. Atenas es un portal o una frontera a la que llega mucha gente que puede tener visibilidad», dijo Szymczyk.
Por su parte, el alcalde ateniense, Yorgos Kaminis, califica de “muy importante” la iniciativa que, según él, colocará a Atenas en el centro del mapa cultural mundial. Atenas en estos momentos refleja los múltiples aspectos de la crisis del mundo contemporáneo; no solamente de la crisis económica, sino también de la desigualdad social. Además, siendo puerta de entrada de los principales flujos migratorios, se convierte en un cruce en el que convergen diversas civilizaciones y culturas. En este sentido Europa, que tiene sus propios problemas, tiene mucho que aprender de la capital griega; porque observando a Atenas puede aprender cosas sobre sí misma”, añadió Kaminis.
Para más información sobre la programación y acreditacionew de la prensa, consulten el enlace http://u-in-u.com/es/documenta/2017/
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