Nikos Hadjikyriakos-Ghikas nació en Atenas en 1906 y desde muy joven eligió el camino de la pintura. Durante sus estudios tuvo la suerte de formarse junto al gran pintor Constantinos Parthenis. En 1922, dejó Grecia y se fue a París para profundizar sus técnicas de dibujo y pintura en la Academia Ranson. Al mismo tiempo, estudia literatura francesa en la Sorbona. Un año después, en 1923, exhibe algunas de sus obras en una exposición colectiva en el “Salon des Indépendants”.
Su primera exposición personal tuvo lugar en 1927 en la Galerie Percier, en París, donde su obra despertó el interés del propio Picasso. Por otro lado, su primera exposición en Atenas, se organizó el año 1928 en la Galería Stratigopoulos, junto a obras del escultor Michael Tombros. En 1934, ya siendo un artista de renombre, decide abandonar París y establecerse en Atenas. Entre 1935 y 1937 fue también editor de la revista «El Tercer Ojo», dedicada a las artes visuales.
En 1937, se encarga de las reparaciones de la casa de su infancia en Hidra. Fue en esta isla donde pintó sus primeras obras en las que se distingue claramente su estilo artístico; una combinación de elementos cubistas que integran con maestría la naturaleza, la luz y la arquitectura de Grecia.
De 1941 a 1958 enseñó en la Escuela de Arquitectura de Atenas y en 1972 fue nombrado miembro regular de la Academia de Atenas. Sus obras fueron acogidas en más de 50 exposiciones, en Atenas, París, Londres (ciudad donde tuvo lugar su última gran exposición en la Royal Academy en 1988), Ginebra, Berlín y Nueva York. A excepción de las colecciones privadas de todo el mundo, su trabajo artístico se pueden admirar en el Museo de Arte Moderno de París, en la Tate Modern de Londres, en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York y en la Pinacoteca Nacional de Atenas, institución a la que Hadjikyriakos-Ghikas legó 46 de sus obras.
Cabe destacar que Hadjikyriakos-Ghikas, además de dedicarse a la pintura, al dibujo y la escultura, participó en la concepción del decorado y vestuario de obras teatrales e ilustró varios libros.
Murió en 1994. En 2006, se organizó una exposición retrospectiva de su obra en la isla de Syros y en el Museo Benaki de Atenas
A pesar de haber iniciado su carrera artística con fuertes influencias cubistas, Hadjikyriakos-Ghikas, se inspiró, especialmente en sus últimos cuadros, en el fauvismo, el simbolismo y el constructivismo. Como toda la generación de los años 30, la Primera Guerra Mundial y la Tragedia de Asia Menor le marcaron profundamente. El artista cuestionó el “helenismo”, junto a grandes figuras de la poesía griega como Elytis y Seferis, el novelista Theotokas y el pintor Kontoglou. Hidra, la isla de su infancia, desempeñó un papel muy relevante en la estética de su obra, permitiéndole combinar los elementos geométricos del cubismo, con la arquitectura y la luz de Hidra. Esta última seguirá siendo durante toda su vida, su isla favorita y la isla lo homenajeará, como uno de sus mayores representantes, erigiendo una estatua en su nombre.
Texto orginal en francés vía Grece Hebdo
(Traducción al castellano C.S)
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