Ubicada en el Mar Egeo, Tinos es una de las mayores islas del archipiélago de las Cícladas. Al oír su nombre dos cosas nos vienen rápidamente a la mente; primero, la impresionante iglesia de la Virgen María y, segundo, sus importantes artistas, escultores y pintores, como GuizisLytrasChalepás

Según la mitología, la isla fue la morada del dios de los vientos, Eolo. Obviamente, esta referencia mitológica explica el fenómeno de los muy fuertes vientos que afectan a la isla hasta hoy. El nombre «Tinos» es también muy antiguo -probablemente de origen fenicio- y se asocia con la palabra «tannoth», que significa «serpiente». Por eso, la isla se llama también Ophiousa, que en griego significa «isla de las serpientes», o Hydrousa (del griego hydor que significa agua) dado que tiene abundantes aguas. Durante cinco siglos formó parte de la Serenísima República de Venecia y en 1715 pasó bajo dominio otomano hasta 1821 que se unió a Grecia. 

En la historia moderna, fue escenario de importantes acontecimientos, como por ejemplo durante la Segunda Guerra Mundial, cuando, el 15 de agosto de 1940, el buque griego de guerra «ELLI», atracado frente al puerto de Tinos participando en las celebraciones de la Virgen María, fue torpedeado por un submarino italiano. Asimismo, durante la ocupación alemana, los aliados convirtieron a Tinos en el mayor centro de sabotaje en el mar Egeo. 

Su playas y pueblos 

Tinos presenta un paisaje variopinto, bastante montañoso, de abundante vegetación y muy fértil. Merece la pena atravesarla a todo su largo y ancho para conocer sus hermosas playas –algunas totalmente vírgenes- y sus pueblecitos tranquilos de impresionante belleza, así como sus tradicionales palomares y los cientos de ermitas esparcidas por toda la isla. Ofrece muchos puntos de atracción, entre ellos varios museos y centros culturales, llegando a sorprender hasta a los más exigentes. Cabe destacar el Museo Arqueológico que exhibe piezas del santuario de Poseidón y Anfitrite, a unos 3km de la ciudad. 

Xinara Tinos

Con respecto a sus playas, las más cercanas a Jora son las playas de Kionia, de Agios Sostis, de Agios Fokás, de Agios Romanós y la de Kolimpithra. Más al norte, se encuentran playas más aisladas que ofrecen una estancia pacífica mientras que, al sur, está la muy concurrida playa de Pahia Ammos, quizá la más hermosa de toda la isla. Las playas Kumelás y Malí tienen la ventaja de estar protegidas del viento y, sin duda, merece la pena darse un chapuzón en la hermosa bahía de Isternia y en la playa de Vathí, ambas al lado suroeste de la isla. 

Entre los pueblos que destacan es Kardianí, situada casi en el centro de Tinos. Verde, con abundantes aguas y vistas panorámicas al mar, sorprenderá a los visitantes con su arquitectura y sus playas azules. El próximo pueblo es el de Isternia. A unos 20 km de la capital, fácilemente podría ganar el título del pueblo más bello de Tinos. Es tradicionalmente habitado por artesanos de mármol y dando un corto paseo a través de sus estrechas calles se pueden ver los muchos talleres de mármol, asi como el Museo de los Artistas de Isternia. 

Pirgos es de los pueblos más grandes de la isla. Tiene gente durante todo el año y aquí se encuentra la Escuela de Bellas Artes de Tinos. En la plaza del pueblo se puede visitar el museo del escultor Yanulis Jalepás y el Museo de los Artistas de Pánormo. Vólax es una aldea de las más pintorescas cuyos habitantes tejen cestos estupendos; escondida entre rocas de granito, impresiona con su particular paisaje ideal para escalar. 

Tinos tiene, también, algunas cuevas, aunque no exploradas. La primera se encuentra en la región de «Gastria» y dos más en la región de «Pánormos» en el noroeste de la homónima bahía. 

Tinos como destino religioso 

Tinos Panagia 524

Es considerada como la capital del turismo religioso en Grecia. La Iglesia de la Virgen María de Tinos es uno de los lugares de peregrinación más importantes del país. Los días 25 de marzo y 15 de agosto, cuando se celebran la Anunciación y la Dormición de la Virgen, respectivament, en la isla se congregan miles de fieles de todo el país para participar en las solemnes celebraciones. Pero, Tinos es, también, un centro católico importante. Dado su largo dominio veneciano, siempre han coexistido en la isla los ortodoxos con los católicos; convivencia que queda patente en las 220 iglesias católicas que hay en la isla sobre un total de 750. 

Antes de abandonar este paraíso natural, no olviden de probar sus alimentos locales, entre los cuales varios tipos de quesos, miel, diversos productos de carne de cerdo, como la salchicha “lusa”, aceitunas, higos y, por supuesto, sus famosos vinos blancos.