Alexis Tsipras revalida su poder con una amplia ventaja en las elecciones del domingo acaparando el 35,46 de los sufragios; porcentaje que se traduce en 145 escaños de los 300 que tiene el Parlamento griego. 

Los resultados electorales dejan al partido conservador de Nueva Democracia en el segundo lugar con un 28,1% y 75 representantes parlamentarios, mientras el partido neonazi Aurora Dorada se consolida en la tercera posición con 6,99% y 18 escaños. Sigue el PASOK, el otrora omnipotente partido socialista, con 6,28% y 17 escaños y por debajo de él siguen el Partido Comunista de Grecia (con 5,5% y 11 escaños), el centrista To Potami (4,09% y 11 escaños), los Griegos Independientes (3,69% y 10 escaños) asientos y, por último, la Unión Centrista (3,43% y 9 escaños) que hace su debut parlamentario superando el umbral del 3% que establece la ley electoral griega; barrera que por poco (2,9%) no han conseguido franquear los disidentes de SYRIZA que, habiendo discrepado con el tercer rescate, habían formado su propio partido, la Unidad Popular. 
Tras conocerse los resultados, Alexis Tsipras acudió al centro electoral de su partido, instalado en la céntrica plaza de Klaftmonos, donde agradeció a los griegos por “este claro mandato para cuatro años” que le han concedido. “A partir de mañana nos arremangamos para trabajar duro”, dijo Tsipras ante sus eufóricos simpatizantes afirmando que estas elecciones envían a los europeos el mensaje de que “Grecia es sinónimo de lucha y dignidad”. 
El nuevo gabinete 
Al haberse quedado a seis escaños de la mayoría absoluta (151 escaños), Alexis Tsipras tuvo que repetir el pacto gubernamental con Panos Kammenos, líder de la derecha soberanista Griegos Independientes, reeditando así la coalición de enero. 
El nuevo equipo ministerial de Tsipras fue presentado el martes por la noche y tomó posesión de sus cargos el miércoles por la mañana. Podría calificarse de continuidad, ya que apenas presenta cambios. Se mantiene el núcleo duro económico con Euclides Tsakalotos a la cabeza, artífice del tercer acuerdo del rescate tras la dimisión de Yanis Varufakis, y Panos Kammenos vuelve a asumir la cartera del Ministerio de Defensa. Intacto sigue, también, el gabinete del Primer Ministro, con Yanis Dragasakis como Vicepresidente, Nikos Papás como Ministro de Estado y Olga Yerovasili en el cargo del portavoz del Gobierno. 
Algunos ministerios tienen nombres nuevos, otros han sido divididos en varios departamentos, pero en esencia los cambios son mínimos. 
En total 16 ministros, 16 ministros adjuntos y 12 viceministros -entre los cuales solamente cuatro mujeres-, serán llamados a “aplicar el plan de rescate con justicia, lograr la recuperación de la economía y dejar una huella de izquierda el día en que dejemos el Gobierno», según las palabras del Vicepresidente Yannis Dragasakis. 
Estabilidad, deuda, corrupción, las prioridades del nuevo Gobierno 
El día siguiente, tras jurar su cargo ante el Presidente de la República, el alexis Tsipras declaró que hará “todo lo posible para sacar el país de la crisis y para que Grecia vuelva a ser un país fuerte, un socio igualitario en la U.E.” y especificó las prioridades urgentes de su gobierno, a saber: “Restablecer la estabilidad de la economía y el funcionamiento de los bancos, ampliar el terreno que se ganó durante las negociaciones siendo la primera batalla la reducción de la deuda y, por último, emprender reformas profundas para desmantelar el sistema clientelista y de corrupción con la finalidad de satisfacer el sentimiento de justicia de la sociedad griega”. 
La sociología del voto 
SYRIZA alcanzó sus cuotas más altas entre las mujeres (36%), los parados (43%), los jóvenes de entre 18 y 24 años y los funcionarios (37%), mientras Nueva Democracia lo hace entre los pensionistas (37%) y las profesiones libres (30%). El criterio de clase una vez más se hace patente en estas elecciones con los barrios populares votando masivamente por SYRIZA en contraposición a los barrios burgueses donde Nueva Democracia tiene una preponderancia notable. Especial interés presenta el alto porcentaje que SYRIZA logra en las cárceles obteniendo entre el 75% y 90% del voto de los reclusos, así como el aumento del porcentaje de Aurora Dorada entre los cuerpos de seguridad.

Etiquetas: actualidad | elecciones | gobierno griego | política